En un ambiente enrarecido por una polémica arbitral en la víspera, Real Madrid y Barcelona vuelven a enfrentarse, once años después en una final de la Copa del Rey, en esta ocasión en el estadio sevillano de La Cartuja, que acoge un nuevo clásico entre un equipo azulgrana que busca el que sería su trigésimo primer título y un equipo blanco que, con un solo trofeo en la última década, persigue reeditar el triunfo logrado en 2023.
El ambiente está caliente, luego de que el Real Madrid tachara ayer de “inadmisibles” las declaraciones de los árbitros de la final de la Copa del Rey, que denunciaron presiones sobre su imparcialidad por parte de la cadena de televisión oficial del club blanco. El Madrid, en respuesta, se negó a llevar a cabo el programa tradicional de compromisos de la víspera del partido.
Arsenal vs. Real Madrid Foto:EFE
Real Madrid sí juega la final de la Copa del Rey
El club madrileño decidió que ni su entrenador ni ninguno de sus jugadores comparecerían ante la prensa y tampoco realizó el entrenamiento abierto a la prensa. Además, boicoteó el acto protocolario de toma de fotos con los entrenadores y capitanes y rechazó presentarse a la cena de directivas. Incluso se especuló con que se iba a negar a jugar, lo que luego fue desmentido por el propio club merengue.
“Ante los rumores que han surgido en las últimas horas, el Real Madrid C. F. comunica que nuestro equipo nunca se ha planteado renunciar a jugar la final de mañana. Nuestro club entiende que las desafortunadas e inapropiadas declaraciones de los árbitros designados para este partido, efectuadas 24 horas antes de la final, no pueden manchar un acontecimiento deportivo de trascendencia mundial que verán cientos de millones de personas y por respeto también a todos los aficionados que tienen previsto su desplazamiento a Sevilla, y a todos aquellos que ya están en la capital andaluza. El Real Madrid entiende que deben prevalecer los valores del fútbol, a pesar de la hostilidad y la animadversión que hoy han quedado de manifiesto, una vez más contra nuestro club, por parte de estos árbitros designados para la final”, dice el Madrid en un comunicado.
Antonio Rudiger Foto:EFE
Pero sí respondió a lo dicho por los jueces con un comunicado. “El Real Madrid C. F. considera inadmisibles las manifestaciones públicas realizadas hoy por los árbitros designados para la Final de la Copa”.
¿Qué dijeron los árbitros?
Horas antes, el árbitro designado para dirigir la final, Ricardo de Burgos Bengoechea, y uno de sus adjuntos, Pablo González Fuertes, denunciaron en una conferencia de prensa las supuestas presiones de Real Madrid TV a través de videos en los que se pone en cuestión su honestidad arbitral. “Hay que conocer las consecuencias que tienen esos videos. Hay redes sociales anónimas que insultan y amenazan sin ningún control”, denunció el árbitro principal, antes de emocionarse al hablar de su hijo.
Real Madrid vs. Leganés. Foto:EFE
“Cuando un hijo tuyo va al colegio y vuelve llorando porque otros niños le dicen que su padre es un ladrón, es algo muy jodido”.
La sucesión de hechos, a apenas 24 horas de uno de los partidos estrella de la temporada en España, no tiene precedente en la competición. Hasta el punto de que Javier Tebas, presidente de la Liga, que no organiza la Copa del Rey, denunció en un largo mensaje en X un intento por parte del Real Madrid de “control de poder”. “Sólo es deporte, fútbol”, dijo el entrenador del FC Barcelona, Hansi Flick. “Nuestra responsabilidad es proteger a los jugadores y a todas las personas en el terreno de juego”.
DEPORTES CON EFE Y AFP