El principal objetivo del Ayuntamiento de Huesca cuando convocó un concurso para actualizar energéticamente el Palacio de los Deportes que diseñaron Enric Miralles y Carme Pinós fue la reducción del consumo energético de uno de sus iconos arquitectónicos. Los fondos europeos le habían asignado una partida presupuestaria. Y hoy, mantenido el carácter del edificio —de acuerdo con Francisco Magén—, el consumo energético se ha reducido en un 51,68%.
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