El FBI está investigando si un grupo transnacional del crimen organizado puede ser responsable de recientes robos en casas de atletas profesionales en el Medio Oeste de Estados Unidos, de acuerdo con agencias policiales locales y memorándums de ligas deportivas profesionales.
Desde septiembre, han ocurrido robos en casas de jugadores de la Asociación Nacional de Basquetbol (NBA) y de la Liga Nacional de Futbol Americano (NFL) en Kansas, Missouri, Minnesota, Wisconsin y Ohio, reportan los departamentos de policía locales. El robo más reciente ocurrió en casa de Joe Burrow, el mariscal de campo de los Bengalíes de Cincinnati, el 9 de diciembre mientras estaba en Dallas jugando contra los Vaqueros.
El FBI no confirmó la investigación. Sin embargo, en un memorándum el mes pasado, la NBA dijo que el FBI había informado a su equipo de seguridad y que había “vinculado muchos de los robos en viviendas con grupos de robo transnacionales sudamericanos”. El FBI los describió como “bandas sofisticadas y bien organizadas que incorporan técnicas y tecnologías avanzadas, incluyendo vigilancia previa, drones y dispositivos de interferencia de señales”, de acuerdo con el memorándum de la NBA que fue obtenido por The New York Times. Estos grupos van por dinero en efectivo y “artículos que pueden revenderse en el mercado negro, como joyas, relojes y bolsas de lujo”, decía. En la mayoría de los casos, los sistemas de alarma de las viviendas no estaban activados y las casas estaban desocupadas.
La NFL envió un memorándum a los equipos el 20 de noviembre sobre los recientes robos. Informaba a los jugadores que las agencias policiales dijeron que “grupos organizados y hábiles” parecen atacar las casas de los atletas los días de juego. La NFL aconsejó a los jugadores que se abstuvieran de hacer actualizaciones diarias en las redes sociales, así como de publicar imágenes de artículos caros o de sus casas.
Entre las viviendas víctimas de robo figuran las de los jugadores de los Jefes de Kansas City, Patrick Mahomes, el 6 de octubre, y Travis Kelce, el 7 de octubre, de acuerdo con los reportes policiales.
Joyas con valor de cientos de miles de dólares fueron sustraídas de la casa del jugador de basquetbol Mike Conley Jr., de los Minnesota Timberwolves, el 15 de septiembre, dijo el Departamento de Policía de Medina. Al día siguiente, más de 100 mil dólares en artículos fueron robados de la casa de Karl-Anthony Towns, entonces jugador de los Timberwolves.
El 2 de noviembre, la policía respondió a un robo en la casa de Bobby Portis, un jugador de basquetbol de los Milwaukee Bucks, mientras jugaba contra los Cleveland Cavaliers, dijo el jefe de policía Michael Gaynor de River Hills. Dijo que al menos tres hombres irrumpieron en la casa y se llevaron artículos con valor de más de un millón de dólares.
Gaynor dijo estar en contacto con otras agencias policiales locales y el FBI sobre posibles vínculos con los otros robos.