El Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) publicó este viernes los principales resultados de la inflación en Colombia, revelando que la inflación mensual de febrero se ubicó en 1,14%. Este resultado aceleró nuevamente la inflación anual en el país, elevándola del 5,23 % al 5,28 %.
Durante febrero, los principales aportes a la inflación provinieron de tres grupos: el primero de ellos fue el de alojamiento y servicios públicos, donde la variación de los arriendos y los costos asociados a la copropiedad siguen registrando presiones relevantes. No obstante, la mayor contribución provino de los servicios públicos, particularmente por el incremento en las tarifas del gas, que a nivel nacional superaron el 14%.
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En segundo lugar, el sector educativo también tuvo un impacto significativo. En esta ocasión, la inflación del sector educativo superó el 5% en el mes, con la educación básica registrando el mayor incremento, mientras que las tarifas de las instituciones técnicas presentaron variaciones, aunque inferiores al promedio del sector.
Inflación
En tercer lugar, el sector del transporte también contribuyó a la inflación, en parte por el servicio de rutas escolares, pero principalmente por ajustes en las tarifas de servicios públicos en las ciudades. Adicionalmente, se observó un incremento en los precios de los alimentos, aunque a una tasa moderada, lo que sugiere una ruptura en la tendencia de estabilidad que se había mantenido el año anterior.
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Otros sectores también continúan reflejando el impacto del aumento del salario mínimo. Servicios como la hotelería, algunos cines y restaurantes han seguido ajustando sus precios al alza, posiblemente debido a mayores costos laborales. En este contexto, el cumplimiento de la meta de inflación del Banco de la República, fijada en 3%, parece estar en riesgo, lo que genera una presión adicional sobre la entidad, según explica el banco Scotiabank Colpatria.
“Dado que la inflación se ha acelerado por segunda vez consecutiva, se proyecta que el Banco Central mantendrá las tasas de interés en su reunión de marzo y reanudará el ciclo de recortes solo cuando se presenten señales económicas más favorables“, aseguró Jackeline Piraján, economista de la entidad bancaria.
Inflación
La entidad bancaria asegura que, por el momento, descartan la posibilidad de que la inflación vuelva a ubicarse dentro del rango meta este año, estimando que esto solo ocurrirá en 2026.
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En consecuencia, las tasas de interés en la economía seguirán siendo relativamente altas como en 2024, con reducciones graduales en un contexto de elevada incertidumbre internacional, riesgos inflacionarios a nivel local y volatilidad fiscal, factores que podrían afectar diversas variables macroeconómicas y, en segunda instancia, la inflación futura.
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