Comenzó el proceso formal con el que el Gobierno Nacional busca cuadrar el Presupuesto General de la Nación para el 2026 y al parecer los llamados a ajustar el gasto y las turbulencias generadas por la crisis fiscal que enfrenta el país han llevado a que desde el Ejecutivo tomaran conciencia sobre la importancia de apretarse el cinturón.
Desde el Ministerio de Hacienda radicaron el anteproyecto para definir las cuentas de ingresos y gastos del año que viene y allí plantearon un presupuesto total de $519,5 billones, cifra que marca un ajuste respecto a los $523 billones solicitados para el 2025, que al final se redujeron a $511 billones tras la caída de la ley de financiamiento.
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Según el documento radicado en el Congreso de la República, el 22,1% de los recursos planteados por el gobierno Petro serán para el pago de deuda, es decir, $115,2 billones. Con esto se ratifica que el pago de este rubro seguirá siendo una de las prioridades del país, dado que todavía absorbe una gran parte del Presupuesto.
Los recursos destinados a deuda marcan $5,4 billones más que los $109,8 billones que se marcaron para 2025, lo cual se traduce a un primer vistazo en un crecimiento del 5%. En diversas ocasiones, los centros de estudio económico han puesto sobre la mesa que mientras esto no se ajuste y se reduzca la deuda, el país seguirá avanzando con poco margen de maniobra fiscal.
Los sectores de Hacienda ($30,4 billones), Defensa ($44,2 billones), Salud ($68,4 billones), Educación ($79,2 billones), y Trabajo ($54,5 billones), son los de mayores asignaciones para el 2026. Para el caso de Vivienda, el monto proyectado para el año entrante es de $7,3 billones, cifra muy similar a la de Minas y Energía, a la que se le asignarían $6,2 billones.
Pesos colombianos
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Deporte e innovación
Uno de los puntos que llama la atención es que, una vez más, el deporte, la ciencia y la innovación serán los grandes perjudicados en las cuentas de gasto, ya que recibirán apenas $198.159 millones y $120.709 millones, respectivamente. Esto ocurre a pesar de que diversas organizaciones y deportistas reconocidos han alzado la voz en repetidas ocasiones para pedir que no se recorten recursos a estos sectores, considerados clave para el desarrollo del país y la lucha contra la pobreza.
Para dimensionar la gravedad de los recortes en estos sectores, basta con señalar que, entre 2016 y 2024, el Ministerio del Deporte experimentó un aumento sostenido en su presupuesto, pasando de $48.591 millones a más de $1,3 billones. Sin embargo, en 2025, los recursos se redujeron a tan solo $400.000 millones y, para el próximo año, el presupuesto no alcanzará siquiera la mitad de esa cifra.
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En cuanto a ciencia y tecnología, Colombia ya se destaca por tener uno de los niveles de inversión más bajos en esta área y según el Banco Mundial, mientras el gasto promedio en América Latina es del 0,65% del PIB, en Colombia este indicador no supera el 0,22%. A pesar de esta situación, desde 2024 se han registrado reducciones que han llevado al presupuesto más bajo de los últimos 21 años.
También vale la pena decir que a pesar de que el gobierno había prometido aumentar la inversión en ciencia, tecnología e innovación del 0,26% del PIB en 2021 al 0,5% durante el cuatrienio, esta meta sigue siendo muy inferior a los estándares internacionales y las recomendaciones de expertos desde 1990. Además, en lugar de acercarse a este objetivo, el gobierno se ha alejado, reduciendo el presupuesto destinado al sector, lo que genera preocupación.
La financiación de este sector depende del Presupuesto General de la Nación y del Sistema General de Regalías, pero históricamente ha sido baja. Entre 2005 y 2022, representó apenas el 0,04% del PIB, y bajo el gobierno de Gustavo Petro disminuyó al 0,03% en 2023 y al 0,02% en 2024; por lo que con los cambios que se buscan para el 2026, se mantendría una tendencia que no permitirá crecer el sector.
Ministerio de Hacienda y Crédito Público.
Foto: CEET – Néstor Gómez
¿Recortes o buscar más plata?
Uno de los primeros puntos a destacar en las cuentas de gasto del Minhacienda es que son menores a las de años anteriores, con lo cual se avizora que el presidente Petro no apostará por buscar recursos más allá de los que tiene, tal y como ha sucedido en los dos años anteriores, en los que incluso ha tratado de impulsar una nueva reforma tributaria.
No obstante, hay que tener presente que si bien apretarse el cinturón es la salida más sensata para los analistas, centros de estudio económico y hasta el mismo Carf, el presidente Petro al parecer piensa diferente y en este sentido, desde el Minhacienda han dicho que se la jugarán por aumentar los ingresos para sustentar el creciente uso de recursos en las apuestas sociales de la Casa de Nariño.
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Dicho planteamiento al parecer no convence a los inversionistas, tal cual lo resaltó BTG Pactual en un reciente informe en el que revisó la situación fiscal y económica de la Nación y alertó que los anuncios de Hacienda y el presidente Petro, no está sirviendo de prenda de garantía para los inversores, quienes estarían llevando su plata a otros destinos.
Es decir que la estrategia del ministro Germán Ávila, para aumentar los ingresos antes de considerar recortes está siendo percibida como difícil de lograr y ha generado incertidumbre en el mercado, al tiempo que el enroque en esta cartera, generó una reacción negativa en los mercados financieros, especialmente en el mercado de deuda pública.
Cabe recordar que la presentación del anteproyecto es apenas el primer paso que debe dar el Gobierno Nacional para que empiecen los debates y conversaciones frente al Presupuesto General de la Nación del 2026, teniendo su punto más álgido durante el tercer trimestre del año, cuando ya se tramite formalmente en el Legislativo esta iniciativa.
