Carolina Hernández decidió hace 20 años entrar de lleno en el mercado inmobiliario de EE. UU. Hoy, luego de alcanzar el éxito, decidió escribir un libro en el que cuenta su ruta y la de muchas personas con las que ha compartido. A su paso por la Feria Internacional del Libro de Bogotá, que finaliza este fin de semana, dialogó con Portafolio.
¿Puede una persona desde la economía informal construir riqueza?
Sí, claro. No es un camino fácil, y exige más esfuerzo y disciplina, pero está al alcance si se parte de un principio fundamental: vivir por debajo de lo que se gana. Este hábito, adaptado a cada realidad, permite empezar a generar pequeños ahorros, incluso desde lo mínimo.
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Con el tiempo, esos ahorros permiten transitar de la urgencia a la estabilidad y luego a la planificación.
A veces, una sola idea bien ejecutada puede cambiar radicalmente el rumbo financiero de una persona. Pero incluso, sin una gran idea, la constancia en los hábitos puede abrir nuevas oportunidades.
El objetivo es alcanzar lo que llamo vivir por adelantado: trabajar hoy no para pagar lo vencido, ni lo inmediato, sino para financiar el futuro. Eso no solo brinda paz mental, sino una plataforma sólida para crecer. La riqueza no depende exclusivamente del punto de partida, sino de las decisiones que se toman cada día.
¿Existe una edad para iniciar?
No hay una edad ideal para comenzar a construir fortuna. La edad perfecta es el momento en que uno toma conciencia y decide hacerlo. He trabajado con personas de 20, 40 o 60 años y en todos los casos he visto transformaciones reales.
Obviamente, quien empieza más joven tiene el beneficio del tiempo y del interés compuesto, pero quien empieza más tarde suele tener más claridad, enfoque y urgencia. Cada etapa tiene su ventaja. Lo importante es entender que la libertad financiera no está reservada para una generación en particular.
Está disponible para quien esté dispuesto a asumir el compromiso, independientemente de su edad. Por eso, este libro es una invitación a comenzar desde donde se esté, en el momento en que se decida.
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En su libro dice que uno debe rodearse bien, pero a veces no hay nadie con el perfil para dar ciertos conocimientos…
Insisto en la importancia de rodearse bien. Si no tienes cerca a alguien que te inspire o te enseñe, hoy puedes acceder a libros, podcasts, comunidades y mentores. El conocimiento está ahí, pero hay que salir a buscarlo con humildad y determinación. Romper barreras empieza por entender que crecer solo es más difícil.
Pedir ayuda no es debilidad, es inteligencia. Y abrirse a aprender de otros puede marcar la diferencia entre estancarse o avanzar.
En sector inmobiliario como el de EE. UU., en el que hay un sube y baja, ¿cómo decidir cuándo entrar y en cuándo salir?
El mercado inmobiliario tiene ciclos marcados y, como vimos en la crisis de las ‘subprime’, una mala decisión de entrada puede tener consecuencias serias.
Por eso, aunque tener una buena estrategia es fundamental, el timing también juega un papel crucial. Invertir no es solo cuestión de comprar un buen activo, sino de hacerlo en el momento adecuado, cuando las condiciones del mercado, las tasas y las proyecciones hacen sentido con tu perfil y tus objetivos. El secreto está en unir estrategia con observación: saber leer el mercado, tener paciencia, y no dejarse llevar por la emoción ni por la prisa.
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¿Qué otras opciones hay en el mercado de ese país? ¿Alguien desde otra nación puede invertir?
Estados Unidos ofrece muchas opciones para inversionistas extranjeros, desde bienes raíces y acciones hasta fondos indexados, franquicias y bonos. Lo valioso es que muchas de estas alternativas están disponibles incluso para no residentes, siempre que se cumplan ciertos requisitos legales. La clave está en informarse bien, definir un objetivo claro y actuar con estrategia.
¿Para invertir se requiere mucho dinero?
No necesariamente. Esa es una de las creencias más comunes y limitantes. Hoy, gracias a la tecnología y la democratización de la información, es posible comenzar a invertir con montos mucho más bajos de lo que la mayoría imagina. Lo más importante no es cuánto dinero tienes para empezar, sino tener la mentalidad, el conocimiento y la constancia para hacerlo bien. El capital puede crecer y lo que realmente transforma es la decisión de comenzar.
¿En qué invertir hoy y no morir en el intento con el riesgo de crisis mundiales?
Es verdad que vivimos tiempos de incertidumbre, con crisis internacionales y políticas económicas fluctuantes que generan desconfianza. El proteccionismo y la reconfiguración de bloques económicos hacen que invertir sea más complejo, pero también abren nuevas oportunidades para quienes se preparan adecuadamente. Hoy, la clave está en diversificar, tanto geográficamente como en tipos de activos. Inversiones en sectores menos vulnerables a crisis políticas y económicas, como bienes raíces en mercados sólidos, tecnología, y empresas con fundamentos sólidos, siguen siendo opciones atractivas.
Además, las inversiones en activos refugio como el oro o criptomonedas, si se gestionan con prudencia, pueden ofrecer protección.
Lo más importante es tener un enfoque a largo plazo, estar bien informado y contar con un plan de contingencia. No hay inversiones inmunes a la volatilidad, pero con una estrategia diversificada, se puede minimizar el riesgo y aprovechar las oportunidades que surgen en medio de la incertidumbre.
CÉSAR GIRALDO
Subeditor de Portafolio
cesgir@portafolio.co
