El presidente de EE UU, Donald Trump, ha pedido este miércoles la cárcel para los responsable del fallo de la escalera mecánica de la sede de la ONU, que se averío cuando el mandatario y su esposa, Melania, subían en ella de camino a la sala de la Asamblea General donde iba a pronunciar un discurso. El parón de la escalera mecánica, junto con otros incidentes como la avería del teleprompter, le permitió bromear el martes en la tribuna de oradores sobre el mal estado de mantenimiento de las instalaciones de la sede de Naciones Unidas —y de lo mucho que se perdió la organización al no conceder a su empresa un contrato de reformas antes que saltara a la política—, pero este miércoles el mandatario ha ido más allá en su agravio mediante un post en su plataforma Truth Social.
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