Si tuviéramos que escoger el principal flagelo de Colombia, sin duda y de lejos ese sería la corrupción. Cálculos de Transparencia por Colombia dicen que entre 2016 y 2022 se perdieron casi $ 22 billones en corrupción en Colombia, afectando principalmente a niños y jóvenes del país por el robo.
Una vergüenza, además de ser una situación que no ha cambiado y de la que, también lamentablemente, escuchamos noticias todas las semanas con algún escándalo que estalla.
¿Podría la tecnología ser la respuesta y el remedio que tanto anhelamos para este flagelo? Definitivamente, sí.
Me topé con un muy interesante artículo titulado Percepción de la inteligencia artificial en la lucha contra la corrupción: una exploración al caso del Estado de Colombia, en la revista Ópera de la Universidad Externado, que plantea una aproximación muy interesante sobre cómo la IA podría ayudarnos a contener y optimizar las iniciativas de lucha contra la corrupción en el país.
De cómo estos algoritmos, bien implementados y con recursos técnicos suficientes, estarían en capacidad de identificar, filtrar y alertar a las autoridades, entes de control y sociedad en general de actividades sospechosas o directamente ilícitas en el monitoreo activo de la contratación pública para anticiparse a anomalías en sobrecostos, la idoneidad de los contratantes, evitar favoritismos, licitaciones sastre, empresas o uniones temporales ficticias, etc.
La IA, en conjunto con otras tecnologías como blockchain (que aseguran la idoneidad e inviolabilidad de los datos y los procesos digitales) y los datos abiertos, complementaría un modelo de transparencia institucional y veeduría ciudadana sólido.
¿Qué falta para lograr que la tecnología ya existente trabaje para nosotros contra la corrupción? Falta voluntad política. Que se ordene la inversión en mayor y mejor infraestructura, en formación y capacitación de talento humano, que se fortalezca institucionalmente al país para luchar contra la corrupción, con estándares abiertos y públicos para el manejo de los datos, la contratación y las compras del Estado, entre otros.
En países del primer mundo, hace rato el blockchain y ahora la IA son las principales armas contra la corrupción. Antes de satanizarla o señalarla como ‘un arma del capitalismo’, la IA puede ser la respuesta para afrontar, con éxito de verdad, la corrupción en Colombia. Eso, si así lo queremos.
JOSÉ CARLOS GARCÍA R.
Editor Multimedia
@JoseCarlosTecno