El Gobierno de Ecuador declaró este viernes 19 de abril un estado de “alerta máxima” luego de identificar una amenaza concreta de magnicidio contra el presidente Daniel Noboa.
La alerta fue emitida por el Ministerio del Gobierno, que activó de inmediato un operativo de seguridad de gran escala para proteger la vida del mandatario y la estabilidad del Estado.
El nuevo presidente de Ecuador, Daniel Noboa. Foto:AFP
Según el comunicado oficial, la amenaza provendría de “estructuras criminales con vínculos políticos” que, tras haber perdido las elecciones, estarían intentando imponer el caos a través de la violencia. Las autoridades aseguran que se trata de una conspiración en desarrollo que no solo busca atentar contra el presidente Noboa, sino también generar inestabilidad institucional y sembrar el miedo entre la población.
El documento titulado “La venganza de los malos perdedores” advierte sobre posibles atentados terroristas, disturbios violentos y acciones coordinadas para desestabilizar el país. Estas serían ejecutadas por grupos delincuenciales que actúan en alianza con sectores políticos identificados por las autoridades como responsables de una escalada de violencia reciente.
En respuesta, el Ejecutivo ordenó la activación inmediata de protocolos especiales de seguridad nacional. Las Fuerzas Armadas, la Policía Nacional y los servicios de inteligencia fueron desplegados para reforzar la protección del presidente, custodiar edificios estratégicos y vigilar puntos vulnerables en todo el territorio nacional.
El nuevo presidente de Ecuador, Daniel Noboa. Foto:AFP
“La intención de estas estructuras no es solo política, sino claramente delictiva y desestabilizadora. Pretenden destruir los avances que hemos conseguido y poner en riesgo la democracia”, señala el comunicado. El Gobierno también hizo un llamado a la ciudadanía para mantener la calma y confiar en las instituciones del Estado.
Desde que Noboa asumió el poder, su administración ha enfrentado una ola de violencia atribuida a organizaciones criminales, muchas de ellas ligadas al narcotráfico. No es la primera vez que el Ejecutivo denuncia intentos de sabotaje contra sus políticas de seguridad, pero esta sería la advertencia más directa sobre un posible atentado contra la vida del presidente.
El Gobierno ha reiterado que no cederá ante las amenazas y que se mantendrá firme en su lucha por recuperar la seguridad y la paz en Ecuador. La situación continuará siendo monitoreada en tiempo real, mientras las autoridades evalúan nuevas medidas para contener cualquier posible escalada de violencia.
REDACCIÓN ÚLTIMAS NOTICIAS