El presidente francés, Emmanuel Macron, anunció su intención de “reconstruir” Mayotte, archipiélago del océano Índico, y prometió la llegada de agua y alimentos antes del domingo 22 de diciembre por la noche, tras el paso del devastador ciclón Chido.
“Fuimos capaces de reconstruir nuestra catedral [de Notre Dame] en cinco años. Sería un drama que no lleguemos a reconstruir Mayotte“, dijo Macron, de visita en este territorio francés.
Pero abogó por cambiar las “competencias” y las “reglas”, así como “reforzar la lucha contra la inmigración clandestina, al tiempo que se reconstruyen escuelas, viviendas, hospitales, etc”, comentó el mandatario.
Según cifras provisionales, el ciclón Chido causó 31 muertos y 2.500 heridos, aunque las autoridades temen un balance mucho mayor en esta región, la más pobre de Francia.
Este ciclón, el más intenso que pasó por Mayotte en 90 años, alcanzó el sábado vientos de más de 220 km/h. Alrededor de un tercio de la población tiene viviendas precarias, ahora destruidas.
“Queremos que estos barrios de chabolas desaparezcan a largo plazo”, agregó el mandatario.
Francia declaró el estado de “calamidad natural excepcional” para acelerar la aplicación de medidas de urgencia y Macron anunció un fondo de indemnización para las personas no aseguradas.
Asimismo, activó el mecanismo de protección civil de la Unión Europea para reforzar las labores de ayuda en este archipiélago, indicó la cancillería.
La visita del jefe de Estado francés se produce entre críticas por la falta de información de los habitantes antes del paso del ciclón, especialmente de los migrantes de Comores en situación irregular.
“No se avisó a la gente. Tendríamos que haber ido por todas partes y explicar lo que iba a pasar, pero estos no salieron por miedo a la policía”, indicó una trabajadora sanitaria.
Macron, que rechazó las críticas de la mujer, decidió retrasar su marcha del archipiélago al 20 de diciembre para visitar zonas más remotas, ante la magnitud de los daños.
“Nos enfrentamos a fosas comunes al aire libre. No hay rescatistas. Nadie ha venido a recuperar los cuerpos enterrados”, le dijo la diputada local, Estelle Youssouffa.
Entre los reclamos de los habitantes al presidente centroderechista también figuran la falta de agua y alimentos, así como los cortes de telefonía y electricidad.
“Nuestro objetivo es abastecer de agua y alimentos a todas las localidades antes del domingo por la noche”, dijo Macron durante una discusión con políticos locales, asegurando que para ello utilizarían “lanzamientos desde helicópteros”.
Mayotte, situado entre Madagascar y Mozambique (donde el ciclón dejó más de 70 muertos, según las últimas cifras oficiales), tiene oficialmente 320.000 habitantes, pero se calcula que habría entre 100.000 y 200.000 personas más en situación irregular procedentes de Comores.
AFP.