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Según informó el Departamento de Seguridad Pública de Texas (DPS, por sus siglas en inglés) en un comunicado, los vehículos no comerciales estarán sujetos a una tarifa de reemplazo del programa de inspección de US$7,50. El monto se agregará en la cifra total del registro emitido por el Departamento de Vehículos Motorizados de Texas.
En cuanto a los vehículos nuevos que fueron adquiridos en la estrella solitaria que no hayan sido previamente registrados ahí o en cualquier otro estado, la tarifa de reemplazo aumentará a US$16,75 para cubrir al usuario por los próximos dos años.
Los vehículos no comerciales pueden saltarse la inspección, aunque deberán pagar una tarifa de reemplazo.
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“La tarifa de reemplazo del programa de inspección no supone un aumento en el costo de la matriculación de su vehículo. Esta tarifa simplemente reemplaza la fuente de ingresos para los programas y operaciones estatales que antes se sustentaban con las inspecciones de seguridad de los vehículos”, aclaró la agencia gubernamental.
¿Cuáles son los condados de Texas en los que sigue siendo obligatoria la prueba?
De acuerdo con el informe, los condados que requieren de inspecciones se ubican en las áreas metropolitanas principales como Brazoria, Fort Bend, Galveston, Harris y Montgomery.
Las pruebas también seguirán vigentes para los territorios de Collin, Dallas, Denton, Ellis, Johnson, Kaufman, Parker, Rockwall y Tarrant; al igual que en Travis y Williamson. Lo mismo con El Paso. Por su parte, el condado de Bexar se agregará a la lista en 2026.
